
¿Qué es un vaporizador?
Un vaporizador es un dispositivo electrónico diseñado para liberar (sin producir combustión) los compuestos e ingredientes activos de nuestras hierbas y extractos favoritos. Al no producirse la combustión, muchas de las sustancias cancerígenas no se liberan y por lo tanto, el usuario no los consume, además, los vaporizadores calientan las hierbas y extractos casi hasta el punto en el que se produce la combustión, evaporando esos compuestos. No se produce humo sino un vapor lleno de sabor y con un efecto más limpio, resultando una experiencia muy agradable, placentera y menos dañina para nuestra garganta y pulmones.
Los vaporizadores, por su uso, se dividen en vaporizadores de sobremesa y vaporizadores portátiles. Dentro de los portátiles también podríamos, a su vez, diferenciar entre los portátiles y los portátiles tipo Pen.
Los vaporizadores de sobremesa son vaporizadores para tener en casa, coffeshop o asociación. Los vaporizadores portátiles son vaporizadores pensados para poder usarse en cualquier parte, resultando más versátiles que los de sobremesa. Más adelante veremos en profundidad las diferencias entre estos tipos de vaporizadores.
Ahora vamos a pasar a ver la evolución de los vaporizadores a lo largo de la historia.
Breve historia sobre los vaporizadores
La vaporización ha acompañado al hombre desde hace muchos siglos. Una de las primeras documentaciones escritas sobre la vaporización de hierbas es descrita por el historiador griego Herodoto hace 2440 años. En una de sus obras explica como los escitas quemaban hierbas en piedras calentadas previamente produciéndose vapor. No está claro que tipo de hierbas usaban ni si lo hacían en ritos fúnebres o festivos, pero aquella civilización era conocedora de la vaporización de hierbas.
Ya en el siglo XX, en concreto en el años 1927 Joseph Robinson patenta el primer cigarrillo electrónico. Todo quedó en eso porque no se llegó a hacer producción algunam, las razones son varias. Por un lado no había mucha demanda de ese tipo de dispositivos, que resultaban caros de fabricar. De hecho algunos aseguran que no se llegó a hacer ningún prototipo. Otros aseguran que fueron las marcas de tabaco convencional las que hicieron presión para que no triunfase. El caso es que por las razones que fuesen este invento no prosperó. En 1965 fue cuando, de nuevo, a través de otra patente, Herbert A. Gilbert diseño un cigarrillo electrónico para vaporizar similar al que conocemos actualmente, pero tampoco llegó a tener mucho éxito por diversas razones. Si quieres saber más sobre la evolución de los cigarrillos electrónicos puedes hacerlo pinchando aquí.
El padre de los vaporizadores para hierbas según la mayoría de fuentes registradas es Frank William Wood, más conocido como Eagle Bill que era el nombre que le otorgaron los indios Cherokke cuando se unió a su tribu. Activista cannabico, dispensó mucho cannabis a sus amigos con problemas para aliviar sus dolores. En 1993 en la Cannabis Cup de Amsterdam, presentó junto a Ben Dronkers de Sensi Seed, el primer vaporizador para marihuana de la era moderna, basado en la historia de los escitas. Estamos hablando del Shake and Vape o Eagle Bill. Este vaporizador en realidad era una pipa vaporizadora y tuvo un gran éxito comercial en todo el mundo. A partir de ese momento hemos vivido el renacimiento de los vaporizadores de marihuana.
Otro hito importante en la historia de los vaporizadores llegó en el año 2000, cuando se presentó el vaporizador Volcano, creación del diseñador gráfico alemán Markus Storz. Sus materiales, su forma de producir el vapor y el sistema de la bolsa hicieron que enseguida se convirtiese en un top ventas. Muy usado por los usuarios medicinales en todo el mundo, produce una calidad de vapor muy buena y al acumularse en una bolsa, la temperatura bajaba, reduciendo los riesgos. Uno de sus primeros clientes, Jurgen Bickel, se unió a Storz en 2002 formando así Storz and Bickel Gmbh & Co. Los vaporizadores de Storz & Bickel consiguieron el certificado para uso médico lo que los catapultó a la fama. Según parece Storz & Bickel ha sido adquirida en 2018 por la compañia Canopy Growth.
Después del Volcano, aparecieron otros vaporizadores de sobremesa mientras que los vaporizadores portátiles empezaban a ser eficientes en modelos como el Iolite, aunque seguían resultando de poca calidad, caros y no muy discretos. Poco a poco fueron mejorando y así, en el año 2007 se fundó en California PAX LABS que diseño el que es seguramente el vaporizador portátil más vendido de todos los tiempos. Estamos hablando del PAX, en sus diferentes versiones desde el PAX 1 hasta el PAX 3. Se rumorea que este año 2020 es posible que salga al mercado el nuevo PAX 4, habrá que estar atentos. El vaporizador portátil PAX es un dispositivo, discreto, fácil de usar y fabricado con los mejores y más seguros materiales. La producción de vapor es por medio de la conducción y el vapor, al pasar por el circuito llega suave y con todo es sabor a nuestro cuerpo. Según palabras del CEO de PAX James Monsees su inspiración para crear este dispositivo fue el consumidor y la funcionalidad.
Tipos de vaporizadores
Vaporizadores de sobremesa
En primer lugar están los vaporizadores de sobremesa. Dentro de este tipo de vaporizadores podemos encontrar el Volcano y el Arizer Extreme Q, por ejemplo. La mayoría de estos vaporizadores funcionan con enchufe, tienen más capacidad y suelen ser los que se usan para temas medicinales. Dentro de este tipo de vaporizadores, también queremos nombrar al Verdamper, un vaporizador de sobremesa sin enchufe, de muy buena calidad aunque al frágil debido a que es de cristal. Dentro de los vaporizadores de sobremesa también queremos mencionar los e-nails, que son vaporizadores para concentrados que llevan un clavo eléctrico que mantiene la temperatura constante para sacar el mejor vapor, sabor y efecto a nuestros concentrados.
Vaporizadores portátiles
Actualmente y debido al progreso en calidad que han tenido, el tipo de vaporizador más usado es el portátil. Funcionan, en su mayoría cómo un móvil al que hay que ir recargando la batería. Por nombrar algunos tenemos el MIghty, el Arizer Air y el DaVinci IQ2. Cómo comentábamos más arriba, dentro de los vaporizadores portátiles, se encuentran los vaporizadores tipo Pen. Este tipo de vaporizadores son los más discretos y cómodos de llevar debido a su diseño y tamaño, parecidos a un bolígrafo. Este tipo de vaporizadores estilo Pen son los que más se usan para consumir los famosos cartuchos con alta concentración de cannabinoides. Ojo, no confundirlos con los cigarrillos electrónicos para líquidos. Al igual que antes mencionamos los e-nails, en lo que se refiere a vaporizadores portátiles para concentrados que no sean al uso, el e-rig Puffco Peak es el más famoso y vendido hasta la fecha.
Formas de producir el vapor
Las tres principales formas que usan los vaporizadores para producir el vapor son: conducción, convección e inducción. Vamos a explicar cada una de ellas para ayudaros a ver las diferencias.
Conducción
En los vaporizadores por conducción la materia vegetal o el concentrado están en contacto directo con la parte que se calienta. Los vaporizadores que funcionan por conducción producen el vapor más rápido aunque hay que tener cuidado de no mantenerlos mucho tiempo calientes para no recalentar la hierbas o concentrados.
Convección
En el método de calentamiento por convección es el aire caliente el que pasa a través de la cámara donde se encuentran las hierbas o concentrados el que produce el vapor. Este tipo de forma de producir el vapor es la que mejor sabor saca a nuestras hierbas, aunque para poder aspirar el vapor deberemos esperar más tiempo que en los de conducción. Tampoco es mucho tiempo, estamos hablando de unos minutos nada más.
Inducción
El método de producir vapor mediante inducción se logra calentando un material capaz de conducir la electricidad que se produce en el interior del objeto por las corrientes de torbellino.
Existen actualmente muy pocos vaporizadores por inducción en el mercado. Uno de ellos, por ejemplo es el Swithc de Doctor Dabber.
Una de las ventajas de la inducción respecto de la convección es que la temperatura se alcanza más rápido no teniendo que esperar tanto para poder empezar la sesión de vapeo. Respecto de la conducción, tiene la ventaja que la calidad del vapor y del sabor es mucho mejor, estando al nivel de la convección.
Quizá dentro de poco empiecen a salir cada vez más vaporizadores que tengan a la inducción como forma de producir vapor ya que en este momento se pueden contar con los dedos de una mano.
¿Qué sustancias se pueden usar en un vaporizador?
A la hora de comprar un vaporizador debemos tener en cuenta que es lo que vamos a querer vaporizar. Algunos vaporizadores permiten vaporizar varios tipos de sustancias mientras que otros están específicamente diseñados para vaporizar alguno de estos tipos de sustancias que os señalamos a continuación.
Hierbas secas (marihuana)
Aunque se puede vaporizar menta, lavanda y muchos tipos de hojas secas, casi todo el mundo que busca un vaporizador no es para hacer sesiones de aromaterapia sino para vaporizar marihuana. La hierbas que pongamos deben estar bien conservadas y no muy húmedas para poder aprovecharlas bien. Además es recomendable picarlas con un grinder o similar para que queden bien trituradas y así no malgastarla. A la hora de la sesión de vapeo, si lo ponemos a menor temperatura obtendremos un mejor sabor y un efecto más calmante. En cambio, si lo que queremos es sentir algo de punch y un efecto mayor, debeos ponerlo a unos 210 grados.
Cuando vapeamos con marihuana, una vez terminada la sesión no queda ceniza sino que verás como la marihuana queda de color marrón, parecido al tabaco.
Concentrados
BHO, Rosin, Shatter, Diamonds y un montón de tipos de extracciones y concentrados pueden vaporizarse en muchos modelos de vaporizadores. Este tipo de sustancias se obtienen con métodos de extracción a partir de cogollos o hachís consiguiendo así unos niveles de fitocannabinoides muy altos. Si vamos a vaporizar sólo concentrados podemos optar por algún modelo que sirva únicamente para eso, mientras que si vamos a vaporizar tanto hierbas como concentrados podemos optar por un PAX 3 o un Mighty, por nombrar alguno.
Para vaporizar los concentrados y sacarles el mejor sabor al menos debemos ponerlo a 165 grados Celsius, mientras que para obtener el mejor efecto se recomienda ajustar la temperatura a 210 grados Celsius.
E-liquids y siropes
Sí lo que queremos es vaporizar líquidos, entonces lo mejor es optar por alguno de los diferentes modelos de los llamados cigarrillos electrónicos. Existen muchos modelos con diferentes tipos de tanques y potencia. De unos años a esta parte, en especial a partir de la salida del Juul, se han puesto de moda un tipo de mods de tamaño pequeño, que permiten caladas parecidas a las de un cigarro (y no esas a pulmón que hay que hacer con otros modelos) y que usan en su mayoría sales de nicotina. Estas sales de nicotina son concentradas saciando rapidamente al consumidor aunque también ha sido criticado ya que es más fácil volverse adicto a la nicotina.
Usa un grinder
Para poder sacar lo mejor a tus hierbas y que queden bien vaporizadas es muy recomendable hacer uso de un grinder. Un grinder es un molinillo o triturador de hierbas con el que de forma sencilla picaremos nuestras hierbas favoritas y las dejaremos perfectas para vaporizar.
Existen grinders de muchos materiales diferentes como aluminio, plástico, madera e incluso ahora también están saliendo grinders hechos de cañamo que además de dar un buen servicio son earth friendly.
Además de por los materiales, los grinders se pueden diferenciar también por el número de pisos o piezas que tengan. Así, tenemos los grinders de 2 partes en los que picamos la hierba y listo y existen también los grinders de 4 partes en los que hay una malla que va filtrando la resina que se desprende de los cogollos, cayendo a la cuarta parte, denominada depósito, en la que se va acumulando. Estos tipo son los más usuales pero también hay grindrrs de 3, 5 y hasta 7 partes.
Si somos una persona que va a usar el vaporizador en casa y le vamos a dar bastante caña es mejor hacerse con un grinder de 4 partes mientras que si lo vamos a usar fuera de casa y no somos de estar todo el día dándole al vapor, con uno de dos partes nos va a valer.
También, a la hora de comprar un grinder debemos tener en cuenta el tipo corte que tenga, esto es, la forma que tenga la cuchilla. Básicamente existen dos tipos de corte: el corte en forma de pirámide o diente de tiburón, y el corte en forma de rombo. El corte en forma de diente de tiburón pica bien las hierbas pero no tanto cómo el que tiene el corte en forma de rombo, que deja la hierba bien picadita.
En general cualquiera de los cortes es suficiente para poder disfrutar bien de la sesión de vapeo pero puestos a elegir, en caso de ser un vaporizador de calentamiento por conducción, nos interesa que quede bien picada para que ocupe toda la parte que se va a calentar, puesto que, como hemos dicho más arriba, en este tipo de calentamiento la evaporación de los cannabinoides se produce por contacto directo entre nuestras hierbas y la parte que se calienta. Por eso, en ese caso sería mejor usar un grinder con corte en forma de rombo.
Si no tienes un vaporizador de conducción sino de convección, al pasar el aire caliente por la cámara de llenado, si esta está totalmente llena de hierba no va a pasar bien el aire, por eso es más conveniente el uso de un grinder con el corte en forma de diente de tiburón.
Control de temperatura
Para que las hierbas queden bien vaporizadas la temperatura del dispositivo debe ser suficiente para liberar los cannabinoides pero no tan alta como para producir la combustión. Para ello los vaporizadores cuentan con la opción de ajuste de temperatura. En este sentido podemos diferenciar dos tipos de vaporizadores.
Vaporizadores con control total: muchos vaporizadores, a través de la pantalla o de la app para móvil, permiten un ajuste de la temperatura con más menos un grado de precisión. Este tipo de vaporizadores nos brindan un amplio abanico de temperaturas para personalizar nuestra sesión de vapeo.
Vaporizadores con varios niveles de temperatura: este tipo de vaporizadores, aunque no nos ofrecen un control total, suelen disponer de tres, cuatro, cinco, siete o más niveles de temperatura, más que suficiente para experimentar con las diferentes características de cada uno.
A menor temperatura, el vapor será menos denso y el sabor será mayor, y en caso de ponerlo al máximo, entonces el vapor será más denso y el sabor será algo peor aunque siempre mucho mejor que cuando producimos una combustión. A muchos usuarios les gusta empezar la sesión con temperaturas más bajas y acabar la sesión casi al máximo para apurarlo y que no se quede nada sin vaporizar pero la elección de la temperatura dependerá de cada uno.
Control de temperatura en los vaporizadores de sobremesa
El mejor ejemplo para este tipo de vaporizadores nos lo ofrece de nuevo el legendario Volcano. Antes de la llegada del Volcano Hybrid, siempre han existido dos modelos de Volcano. En primer lugar, el Volcano Classic, cuyo control de temperatura es analógico a través de una rueda que nos ofrece nueve niveles de temperatura a elegir. En segundo lugar el Volcano Digital, que disponía de una pantalla en la que podíamos ajustar grado a grado la temperatura. Decimos que disponía porque a partir de la llegada del Volcano Hybrid, desde Store & Bickel anunciaron que ya no fabricarían más el Volcano Digital. Por tanto, actualmente en el mercado podemos optar bien por el Volcano Classic o bien por el Volcano Hybrid. El Volcano Digital ha pasado a ser una reliquia.
Control de temperatura en los vaporizadores portátiles
En el caso de los vaporizadores portátiles, podemos encontrar vaporizadores como el DaVinci IQ, el Arizer Solo (por poner dos ejemplos) en los que el Control de temperatura es total, y otros modelos como por ejemplo varios modelos de la marca Flowermate en los que se puede elegir entre varios niveles de temperatura.
Sí no eres muy fan de la tecnología y no quieres complicarte mucho a la hora de usar el vaporizador puede usar un vaporizador con varios niveles y así no te complicas. Sí, por el contrario quieres descubrir todas la experiencias con un control total podrás sacar los sabores y nubes de vapor más precisos.
Por último, comentar que también existen modelos que disponen de control total, pero para no ir subiendo con los cursores, memoriza tus cuatro o cinco temperaturas preferidas y olvídate de ir dando a los botones cada dos por tres.
Dentro de los vaporizadores portátiles, también existen los vaporizadores tipo Pen o bolígrafo. Estos vaporizadores no suelen ofrecer un control total de temperatura pero sí disponen de distintos rangos de voltaje que se pueden seleccionar pulsando el botón varias veces. La luz led que se encuentra en el botón va cambiando de colores indicando el voltaje, y por tanto, la temperatura va a ser más fuerte o floja, siendo normalmente el verde el que indica la potencia más baja y el rojo la más potente.
Temperaturas ideales para vaporizar
La evaporación de los cannabinoides no ocurre a cualquier temperatura, de hecho, cada cannabinoide se evapora a una temperatura diferente. Podemos decir que es a partir de los 160 grados cuando tanto el THC como el CBD van a ser evaporados, pero existen cannabinoides como el THCV que se evaporarán siempre que alcancemos al menos los 200 grados. La mayoría de los vaporizadores ofrecen rangos de temperatura que van desde los 160 grados hasta los 220 grados no produciéndose en ningún caso la combustión.
Por lo que acabamos de decir, elegir la temperatura ideal para vaporizar va a depender de cada uno. Pero no sólo eso importa, ya que dependiendo de cómo esté nuestra marihuana también debemos optar por una temperatura u otra. En caso de disponer de una marihuana más bien seca, con una temperatura menor ya podrá sacar bien el vapor mientras que si está más bien húmeda, para poder sacar bien el vapor será necesario ajustar la temperatura a niveles más altos. También sería recomendable dejarla bien picada.
Por último, comentar que en el caso de los terpenos, que son los responsables del aroma y sabor, su evaporación se produce a temperaturas bajas, esta es la razón por la que a menor temperatura obtendremos un mejor sabor.
Tiempos de calentamiento
Al hablar de las formas de producir el vapor hablamos sobre que la conducción supone menos tiempo de espera para vaporizar mientras que en los de convección hay que esperar algo más de tiempo. No estamos hablando de una gran diferencia de tiempo, pero es necesario saber que unos tardan más que otros.
También queremos comentar en este apartado que siempre es bueno dejar unos segundos desde que el vaporizador nos indica que ya ha alcanzado la temperatura hasta que le damos la primera calada. Esto es porque el vapor va saliendo poco a poco y hay que dejar que se acumule antes de aspirarlo para tener una calada plena de sabor y vapor. Así pues, deja unos cinco segundos de tiempo entre que llega a la temperatura y das la primera calada. Ojo, esto es igual para el resto de caladas siendo necesario dejar unos segundos entre calada y calada para que se acumule el vapor.
Para acabar, comentaros que los vaporizadores de sobremesa, al tener más capacidad y ser normalmente de convección, necesitan algo más de tiempo para calentarse, seguidos de los portátiles y en último lugar, los vaporizadores tipo Pen, cuya velocidad de calentamiento es casi inmediata. Con este tipo de vaporizadores tipo Pen hay que tener cuidado en este sentido ya que es más fácil acabar recalentando el dispositivo y, por consiguiente lo que tengamos metido dentro.
Baterías de los vaporizadores
Todos los vaporizadores para poder calentarse necesitan de un enchufe, batería o mechero. Vamos a pasar a describir estos diferentes tipos:
Enchufe o toma de corriente: los vaporizadores de sobremesa o escritorio llevan un enchufe, por lo que es necesario conectarlos a la corriente. La ventaja de tener enchufe es que no se gasta la batería nunca, aunque debemos fijarnos en que sea el adaptador necesario para el enchufe de nuestro país, ya que si no, tendremos que comprar un adaptador.
Batería: casi todos los vaporizadores portátiles llevan una batería. De nuevo, son cómo un móvil, debemos ir cargando la batería según veamos que se esta gastando. Es mejor tener siempre bien cargado el vaporizador para aumentar la vida de la batería y algunos modelos incluyen la opción de poder usar el vaporizador mientras se carga.
Actualmente muchos modelos llevan un tipo de batería de tipo casi universal y es posible reemplazarlas así que, cuando por el uso y el tiempo se gasten, podremos comprar otra y sustituirla, alargando así la vida de nuestro vaporizador. El Davinci IQ y el Arizer Air serían dos ejemplos de este tipo de vaporizador.
Mechero: hay un tipo de vaporizadores, normalmente portátiles que funcionan con mechero. Es importante usar un mechero soplete o de llama azul para no estropear el dispositivo y conseguir la mejor vaporización. Un buen mechero soplete es fundamental para hacer más fácil el uso de estos vaporizadores. Tendremos que comprar gas para ir rellenando el mechero y ya está.
La garantía en los vaporizadores
Todos los vaporizadores vienen con algún tipo de garantía, en muchos casos porque así lo impone la normativa. Según el tipo de vaporizador puede variar bastante, así por ejemplo, hay vaporizadores tipo Pen cuya garantía es de tres meses o menos por ser de usar y tirar, otros que ofrecen una garantía de dos o tres años. Dentro de los que más garantía dan a sus vaporizadores tenemos el PAX 3 con diez años de garantía y el que nos ofrece una garantía de por vida, el mítico Magic Flight Launch Box.
La garantía, muchas veces, para poder alargarla es necesario registrarse en la web del fabricante, y suele estar limitada al uso normal, es decir, si en un vaporizador para marihuana, metemos líquidos y se estropea, la garantía no cubre esta circunstancia.
Por último comentar que la garantía, en la mayoría de los casos, no es sobre todas las piezas del dispositivo, sino que la boquilla y otras partes no están incluidas y deberemos comprar los repuestos, normalmente fáciles de conseguir.
Diferencias de precio entre los vaporizadores
Cuando vas a comprar un vaporizador, encontrarás que el rango de precios es muy amplio. Desde una batería tipo pen de 10€ hasta el Volcano Hybrid, que ronda los 500€
A continuación ofrecemos una pequeña guía de precios de vaporizadores.
Menos de 50€
En este rango de precios tenemos desde la baterías tipo Pen, a las que se engancha el cartucho. Hay modelos económicos desde 10€ hasta modelos que valen 50€. La diferencia de materiales, calidad de la batería y tipo de boquilla son las pricipales diferencia para esa varianza de precio.
Dentro de los vaporizadores para marihuana, el Shake And Vape o el Vaponic no superan los 50€ aunque son poco precisos y al ser de cristal pueden romperse fácilmente. Además a este tipo de vaporizadores cuyo calentamiento se hace por mechero, se las considera más bien pipas vaporizadoras ya que hay que pillarles el truco para no quemar la marihuana.
Entre 50 y 100€
En este rango de precios encontramos vaporizadores de calidad-precio razonable, si bien, los materiales empleados, la batería y las posibilidades que nos brinda el dispositivo son menores que en los de gama más alta.
Muchas personas que se inician en el mundo del vapor optan por estos modelos porque no son grandes usuarios, sino más bien ocasionales y no necesitan el vaporizador más potente ni el más caro ya que lo van a usar una vez al día o a la semana. Otros optan por estos modelos y al tiempo, cuando ya se convierten en auténticos vapers porque descubren que les encanta vaporizar, comprar un modelo mejor.
Entre 100 y 200€
En este rango de precios ya podemos encontrar algunos de los modelos de vaporizador que se pueden llamar PRO. Así por ejemplo, las reconocidas marcas DaVinci o Arizer ofrecen algunos de sus modelos entre este rango de precios y son vaporizadores muy buenos.
Otras veces podemos encontrar modelos que hace tiempo superaban con creces esos precios pero que al sacar la marca otro nuevo modelo mejor, ve rebajado su precio siendo a pesar de ello muy buena comprar. Por ilustrar esto último con un ejemplo, el PAX 2, que es muy buen vaporizador, costaba antes 249€, pero cuando salió al mercado el PAX 3, este último pasó a costar 249€, mientras que el 2 paso a costar 149€.
Entre 200 y 300€
En este rango de precios ya vamos a encontrar vaporizadores de alta gama. Los mejores materiales en su fabricación, las mejores garantías, baterías, accesorios, aplicaciones web son algunas de las características que tienen estos vaporizadores de élite. Muchos de estos modelos tienen la ventaja de que sirven para usar tanto con hierbas como para concentrados. Ejemplos de estos tipos de vaporizadores serían el PAX 3, el Crafty+, el Arizer Extreme Q, por nombrar alguno de sobremesa.
Más de 300€
Si buscas lo mejor de lo mejor y estás dispuesto a emplear un buen dinero porque quieres el mejor vapor del mercado vas a encontrar vaporizadores muy PRO como por ejemplo, el Firefly 2, el Mighty, el Verdamper el Puffco Peak o el Volcano Hybrid. Certificación médica, largas garantías y la seguridad se saber que tienes un objeto de colección.
Resumen
Esperamos haberos ayudado a saber más sobre qué es un vaporizador en sus diferentes formas, usos etc.. y no dudéis en dejarnos en los comentarios vuestras dudas o preguntas.
Saludos y, ¡buenos vapores!